Hay problemas técnicos de optimización cuya solución requiere un gasto computacional y de tiempo muy elevado; en general se les llama, por su naturaleza matemática, problemas de tipo NP-completos. Para ellos resultan adecuados los métodos heurísticos de optimización. Un caso concreto es el de la distribución de paquetes discretos de diferentes productos por una red con tramos de doble sentido, en la que hay distintos puntos de origen y destino sometidos a ligaduras de tiempo de llegada y de entrega de cantidades mínimas de producto. Además aparecen fuertes restricciones: los paquetes, unidad mínima de envío, no pueden ir en cualquier orden, ni pueden circular por el mismo conducto en sentidos opuestos. Para resolver este problema se ha empleado una técnica de inteligencia artificial denominada algoritmo evolutivo multiobjetivo (MOEA). Se comienza codificando tanto la solución del problema, como todas las estructuras necesarias para especificar los datos del mismo. Se han diseñado unas funciones de reparación y evaluación de individuos, así como los operadores necesarios para actuar sobre la población total en cada generación. Finalmente, se muestran los resultados obtenidos en un ejemplo de aplicación.